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sábado, enero 31, 2009

Sur de Francia

Hace rato que no agrego una nota aquí, en este tiempo estuve en dos empresas diferentes, trabajando como consultor, empecé las vacaciones de invierno y viajé a París. Hoy quiero escribir sobre mi primer visita a la costa mediterránea francesa, en la primavera pasada.

En el puente de mayo mi novia me invitó a pasar el fin de semana largo en un bungalow en un pueblo llamado Argèles sur Mer, a unos 200 kms. de Barcelona. Después de un par de horas de viaje en coche, llegamos a algo que no sé si podría ser llamado pueblo, más bien era un sitio donde los franceses habían instalado campings de todos los estilos. Había más de 100, distribuidos por avenidas que más bien parecían carreteras (rutas). Después de estar más de una hora buscando, finalmente encontramos nuestro camping. La sorpresa fue que no se parecía en casi nada a los campings argentinos que conociera. Para empezar, no había absolutamente ninguna tienda de campaña (carpa). Sólo había un sector de caravanas (casas rodantes) y el resto eran todos bungalows. Pero hasta éstos eran raros, ya que yo me imaginaba una especie de chozas hechas con troncos, y en realidad eran verdaderas casas con techo de madera a dos aguas.

Aunque la piscina (con hidromasaje incluido) estaba muy tentadora, preferimos disfrutar el calor yendo a Colliure, un pueblo cercano.


El agua, como es común en el Mediterráneo, era completamente transparente.



Caminamos hasta el final de un espigón, donde encontramos este antiguo faro:


Desde allí se tenía una buena vista de parte de este pueblo, de unos 3000 habitantes.




El espigón se apoyaba en unas piedras volcánicas muy grandes, aunque en esta foto no se aprecie bien la escala:


La playa parecía tentadora, pero hacía un poco de viento, así que lo de bañarme en el mar francés quedaría para otra ocasión.




En lo alto de la colina había una fortificación. De hecho, el pueblo tenía dos, y pronto iríamos a la otra.


A lo largo del pueblo había colocados, sobre un pie de hierro, unos marcos de cuadro, pero sin cuadro dentro, colocados para que uno tuviera en cuenta cierta vista de la costa. La idea era simpática: mostrar los paisajes como si fueran obras de arte colocadas a lo largo de la ciudad.


Por supuesto, estos marcos eran bastante curiosos, y mucha gente parecía incapaz de entender su utilidad. Recuerdo con cariño a una señora que metió la cabeza dentro del marco y empezó a mirar hacia los costados, pero desde el otro lado, con ansias de maravillarse. Lamentablemente, Alicia no cayó por el agujero del marco, así que la realidad que la esperaba del otro lado era la misma que de este. Qué decepción más grande.

Más paisajes:



Esa torre fálica y de punta sonrosada pertenece a la iglesia, Notre-Dame-Des-Anges. Después me quejo de la Torre del Agua de Barcelona... De todas maneras existe una justificación para su forma: antes era un antiguo faro, del que se apropiaron al construir la iglesia. Supongo que querían salvarse de tener que hacer un campanario.


Entramos a la segunda fortificación, que creo recordar que había sido residencia de los Reyes de Mallorca. Toda esta región de Francia, el Rosellón, fue catalana hasta que España la regaló a cambio de terminar una guerra que no estaba perdiendo.









Dentro del castillo, en una parte que les quedó libre, prepararon una cancha de básquet:



Nos metimos dentro de la muralla, desde donde había rendijas para poder disparar al que se acercara:



Aquí aparezco yo, metido donde no se debe, un sitio que antes servía de comunicación entre la superficie del castillo y estos pasadizos de defensa.


Había una exposición de arte dentro del castillo. Esto me pareció bonito (son telas separadas y un proyector que hacía juegos con luces).


Salimos del castillo, para recorrer el pueblo.





Recorrimos las callejuelas del pueblo, famoso por su vida artística. Antes era sitio de reunión de los fauvistas, Picasso y Matisse solían visitarlo, entre otros. Además, este pueblo alberga la tumba de Antonio Machado, quien se refugió aquí del avance del franquismo en 1939.



Más tarde viajamos a Perpignán, la antigua capital del Rosellón. Esta ciudad, ahora un poco olvidada por el centralismo francés, tuvo su época de gloria a partir de 1276, cuando Ferrán I fundó el reino de Mallorca, y la ciudad servía de capital de los territorios continentales. Para los argentinos que me leen, hace muchos siglos existía un imperio catalán (el Reino de Aragón) que incluía más o menos Cataluña, Valencia, las Islas Baleares (Mallorca, Menorca, Ibiza), la isla de Cerdeña (ahora Italia), el sur de Francia, Aragón, etc. Se trataba de un imperio importante, ya que controlaba gran parte del Mediterráneo. La lengua principal era el catalán, aunque ahora haya caído en desuso en ciertas regiones (sobre todo, en las que ahora son francesas o italianas). Este es un mapa de Europa en 1470, donde la zona ocre muestra las dimensiones del reino de Aragón. Perdón por el colorido, pero es lo que encontré.


Esto probablemente fueran las puertas del antiguo castillo de Perpignán:


¿La catedral?


Un paseo, muy cuidado, junto al río.


En resumen, este fue mi primer día en el sur de Francia. Hacía calor y sol, aunque fuera comienzos de la primavera, y Collioure me pareció muy bonito, lástima que no pudiéramos aprovechar la playa. Por su parte, Perpignán no es fea, es una ciudad agradable, pero no demasiado llamativa. Volvimos al camping, que esta vez encontramos sin demasiado problema, y nos preparamos para conocer las ciudades costeras de los Pirineos franceses.

17 comentarios:

Anónimo dijo...

fernando me alegro mucho de que reemprendas el Foro a ver si ahora le das intensidad.Te añado una informacion del academico Perez Reverter que aparte su lenguaje literario demasiado desgarrado para mi gusto te dara otra version distinta de esa historia inventada de "imperios catalanes" en la que no se cita el reino de Aragon que cabalga hoy por esa tierra y que quiza te interese para tener una idea mas centrada de este pais.
http://www.e-dazibao.com/criterio/archivos/000880.html
Un saludo muy cordial.

Anónimo dijo...

Fernando he leido despues de ponerte el enlace que debajo de este articulo habia un foro lleno de insultos de los participantes entre si.Si lo hubiera visto no te lo habria puesto porque no me gustan estas disputas.No obstante asi veras como estan las cosas en esta vendita nacion la mas antigua de Europa en la que en el siglo pasado tras la perdida de los ultimos territorios de America y Filipinas en 1898 algunas regiones que habian perdido el comercio con America empezaron a recordar que 500 años atras estabamos desunidos y que eso era estupendo y ese fenomeno esta ahora de lo mas boyante.Como se que te gusta explicarte los porques de nuestras cosas espero que me perdones esta apostilla a tu articulo.
Un abrazo muy cordial.

Anónimo dijo...

Astur, hombre, vale ya. Entre los que de un lado buscan una Cataluña legendaria y los que por otro le niegan el pan y la sal, tenéis a la mayoría de los catalanes hasta los mismísimos.

Que sí, que Pérez-Reverte es un tío leído y académico, pero de la Lengua, no de Historia:
"el conde Ramón Berenguer; que al casarse con Petronila, hija de Ramiro el Monje, rey de Aragón, adquirió como propio un linaje superior, pero renunciando al suyo, no titulándose más que princeps junto a su esposa regina; de modo que el hijo de ambos, ya con Barcelona incorporada a la corona, se tituló rex de Aragón, y nunca de Cataluña"...

Es que, senor Pérez-Reverte, Cataluña nunca ha sido un reino y nunca nadie en la Historia puede haberse atribuido el título de rey de Cataluña. Cataluña era un conjundo de condados feudatarios de uno principal, el de Barcelona. Por eso los sucesores de Ramón Berenguer tenían los títulos de rey de Aragón y conde de Barcelona.

Me ha hecho mucha gracia lo de "linaje superior".

Por otra parte, que esos territorios tuvieran un mismo jefe de estado no significa que estuvieran unidos. Cada uno mantenía sus estructuras políticas diferenciadas. Pero tampoco es cuestión de alargarse más en el tema.

Apreciación final: igual de cansino es el tema del nacionalismo catalán como el del nacionalismo español. Que parece que los "retrógrados" y "cavernícolas" que se remontan 700 años en la Historia son sólo los de una parte. Juas.

Anónimo dijo...

Amigo anonimo gracias por la educacion en tu comentario.Yo no soy espcialista en la historia antigua de Cataluña conozco mejor la de Asturias logicamente.Solo veo que los nacionalistas catalanes tienden a discriminarnos a los demas españoles fomentar echos diferenciales y hacer rancho aparte de forma artificial.En realidad somos iguales .Sois como los demas españoles que amamos particularmente nuestra region que todos creemos que no hay mejor lugar en el mundo esa es una idionsincrasia tambien comun a todos. Pero en nuestro caso sin menoscabar o ser prepotentes con las otras regiones.Quieran o no los nacionalistas tienen una historia comun desde hace siglos con los demas españoles y somos los mismos. No hay pais mas mezclado y homogeneo en Europa basta leer la guia de telefonos de apellidos Barcelona o Bilbao y compararla con la de otra region, .El mismo Carot es un hijo de aragoneses y Montilla de andaluces asi que su historia y antecdentes regionales tienen mas que ver con aragon y con andalucia.Lo que no importa porque son dos regiones como cataluña.Y la historia con mayuscula a la que contribuimos todos y por la que se nos conoce en el mundo es la de España.
Las intenciones de mi comentario fueron dos"provocar a Fernando a que siga con su blog" que esta muy paralizado y que en sus primeros tiempos fue muy interesante ya que las cosas que se ven con ojos nuevos si el que los ve es perspicaz recoge cosas que el que las vive por costumbre ya no aprecia.Y en segundo lugar darle la pista de que es conveniente que sobre estas querellas regionales no solo escuche como veo aveces la version de los nacionalistas catalanes en cuya sociedad esta inmerso sino lo que se piensa sobre estas cosas en el resto de España si las visita.No lo que dicen los nacionalistas que pensaamos los demas españoles, que es bien distinto de lo que de verdad pensamos.Es una forma de estimularlo a viajar y seguir dandonos sus impresiones.
Un saludo muy cordial a ti y a Fernando al que le reitero el animo para que siga.

Fernando dijo...

Hay ciertos temas que siempre crean debate :) En mi opinión, como el concepto de nación tiene poco más de dos siglos de historia, creo que este debate tendría poco sentido para Isabel o Ferrán. Creo además que toda nación, incluyendo la catalana y el estado español, se crea con mucha sangre de por medio. Aquí aún duele que gran parte de la sangre necesaria para construir España haya sido catalana. Aunque estoy seguro que los almogávares no eran santos tampoco.

De hecho, creo que no tengo nada muy interesante que decir sobre el tema, y como estoy un poco engripado, tampoco se debería esperar ninguna rigurosidad. Pero hay un par de ideas que vuelven a mi cabeza. Una es que me parece bien que una región defienda lo suyo (Reverte habla de insolidaridad, pero no es lo mismo estar obligado a ser solidario que serlo por voluntad propia). Tal vez los argumentos catalanes no sean los más precisos, pero son prácticos. Muchos políticos igualan identidad catalana con lengua catalana, y consideran que si la lengua está en retroceso, la identidad también. Para mí son dos cosas diferentes. Un idioma es una herramienta de comunicación, mientras que la identidad es mucho más compleja. Y creo que el idioma catalán no corre ningún peligro, aunque tal vez sí la identidad (de todas maneras, ¿quién aceptaría hoy día los patrones del 1900?). Debe ser más fácil hablar de la decadencia del idioma catalán que de la del pan con tomate o la cultura del trabajo. En cualquier caso, me preocupa un poco más que las regiones parecen competir entre sí a ver quién es la mayor víctima.

La otra idea es que la inercia mueve al mundo. Una vez que algo es puesto en marcha, con mucho esfuerzo y mucha sangre, luego es fácil que siga en movimiento. Creo que esto pasa también con la idea de una nación catalana o de la "homogeneidad" española (aunque tiemblo ante esta palabra, que castra la diferencia). Son dos ideas que llevan algunos siglos (aunque no muchos) dando vueltas por estos territorios, tienen cierta utilidad para demarcar jurisdicciones, y van a estar mucho tiempo más por aquí, pero que no creo que justifiquen ni estereotipos ni odios. Ni resentimientos, ni saqueos, ni pérdida de libertades, ni bombas. Pero son ideas con mucha inercia, que parecen servir de hogar para muchas personas, que deciden pensar su propia vida como una lucha por ciertos ideales.

Y una última palabra sobre la homogeneidad: pienso que es falsa. España mismo es fruto de una heterogeneidad enorme, e incluso es fácil ver en los rostros antepasados moros, germánicos, romanos, etc. Salvo que uno no esté dispuesto a verlo. También entre los catalanes hay diferencias, genéticas y culturales, que no se reducen a explicaciones del tipo "éramos todos puros hasta que vinieron los andaluces y después los sudamericanos". No se trata de la decadencia de una antigua estirpe pura, ni tampoco de su permanencia pese a todo, sino que los orígenes ya eran "impuros", con mezclas de íberos, romanos, griegos, visigodos, moros, etc. A nivel cultural, creo que hay cosas comunes, que incluso exceden el territorio español (la "cultura latina"), pero tampoco hay homogeneidad en todo el territorio, ni siquiera en Barcelona. No sé si exagero, pero esta palabra me recuerda a Rouco Varela intentando imponer el catolicismo. Prefiero la heterogeneidad más absoluta, que es una de las bellezas de Barcelona. Defiendo que ningún individuo debe ser sacrificado en el altar de ningún nacionalismo, aunque no nos guste la imagen que dé de nuestra sociedad.

Dicho esto, quiero agradecerle a Astur por su persistencia y por el tiempo dedicado a escribir en el blog, siempre es interesante leer sus comentarios, y aunque tal vez nunca resolvamos nada, me agrada conocer otras perspectivas.

Saludos a ambos!!!

Anónimo dijo...

Fernando cuanto me alegro de tu continuacion en el Blog.Como supondras si yo deseara charlar con personas que pensasen de forma identica no participaria en el.
El tema de los nacionalismo me pone de mal humor pero a veces se impone cuando una persona viene de otro mundo y se ve que solo esta escuchando por su nueva residencia las mismas cosas hasta que de tan repetidas le llegan a parecer indudables.Sinembargo lo que es induble blanco en Barcelona puede ser indudablemente negro en madrid o en Santander .Eso es asi que le vamos a hacer.Yo me limito a decirte que somos un pueblo que despues de nuestras invasiones llevamos muchos siglos juntos y mezclados al maximo como vera fisicamente cualquier turista que venga de otros paises.Dice Stanley Payne que cuando pasea por Bilbao para un americano no ve ninguna diferencia de la gente ni de los edificios de cuando pasea por Valladolid.Incluso nos parecemos en el amor decomunal a la patria chica de todos.Y en la sobrevaloracion de las fiestas locales y de las costumbres regionales fruto de los siglos.En algunas regiones esta autoestima puede hacerse patologica y del regionalismo surge el nacionalismo local que es la prepotencia y el menosprecio a las otras regiones y claro luego a buscar historias antiguas a retorcerlas para justificar hechos diferenciales victimismos y acaba en agresiones lo cual es tristisimo porque el nacionalismo como algo patologico solo produce sangre desprecio y dolor y cuando es dentro del mismo pais aun es peor porque es mas irracional.
Por mi parte punto final a ese tema no pienso tratar mas ese tema si puedo evitarlo.
Espero con espectacion tu vision de Valencia y de los valencianos y sus diferncias con los catalanes aunque son muy parecidos para mi porque son vecinos.Te sugiero que cuando vuelvas por Santander visites su costa y te acerques a Asturias porque ahi si veras mas contrastres con la costa y la montaña de Cataluña y como siendo preciosas estas dos zonas una mediterranea y otra cantabrica como pueden ser tan distintas.En Asturias veras las montañas mas pegadas al mar que hay en el mundo y podras disfrutar de mar y montaña a la vez.Por eso la mayor parte son Parques Nacionales protegidos de fauna y flora donde habitan los osos rebecos lobos urugayos etc.Por cierto me hace mucha gracia lo mucho que nos visitan J.Pujol y el Lendakari.El primero hombre culto que anda por los montes descubriendo las preciosas Iglesias prerromanicas y el vasco en bicicleta haciendo deporte subiendo montañas.Cada uno con sus aficiones tipicas.
Un abrazo y hasta otra.

Fernando dijo...

Astur:

Por favor ten un poco más de confianza en mi criterio :) No creo ser un mero repetidor de lo que dice el catalanismo, ni creo que por vivir en Asturias mi postura fuera demasiado diferente. Sí me parece más plausible que esté más cerca de cierta forma de pensar catalana porque ya lo estaba desde antes de venir, y de hecho mi elección de quedarme en esta ciudad (en vez de ir a Madrid o Valencia) fue en parte porque me gusta su cultura y sus valores. A mí también me molestan algunas cuestiones de aquí, como el límite de velocidad a 80 o la exigencia de un nivel C de catalán, pero creo que es una sociedad que en general tiene unos valores que me gustan y benefician a todos.

Estoy en contra de los nacionalismos, en lo que tienen de mentira, de ilusión de unidad y homogeneidad, y de sacrificio de personas en su nombre (por ejemplo, el nacionalismo argentino). Sin embargo, cuando se trata de defender los intereses de una región, estoy de acuerdo. Yo hablaría más bien de federalismo, pero alguien le ha colado un buen gol a los catalanes, vascos y demás al calificarlos de "nacionalistas". Y que en un territorio haya reivindicaciones no me parece irracional, aunque Cataluña forma parte de España desde hace siglos, estas cosas son difíciles de resolver. Ya lo ha intentado la China con el Tíbet y Taiwan, la Unión Soviética (todo un eufemismo) con media Asia, la India con Cachemira, etc. A veces se logra la unión, y a veces no. Forzando al otro a ser como uno se logran pocas cosas, yo creo. Y esto va también para la Generalitat en algunas cosas.

He visitado brevemente la costa cántabra, y he visto, de lejos, los Picos de Europa. Es realmente una zona preciosa, en cuanto obtenga el carnet de condudir me gustaría darme una vuelta por allí, recorriendo pueblos. En cuanto a Valencia, creo que te equivocas al igualarla a Cataluña (tal vez por el idioma), las diferencias de valores y de carácter son, en mi experiencia, muy grandes. De hecho, preferiría vivir en una sociedad como la cántabra antes que en la valenciana. De todas maneras, ya me explicaré mejor en la nota que viene, que ya está casi lista.

Saludos y que disfrutes de la nieve!!!

Anónimo dijo...

Estupendo fernando te esperamos con impaciencia.

Anónimo dijo...

Estimados, he leído la discusión recurrente(pero mucho mas moderada que otrora) de Fernando en relación al nacionalismo catalán y si les sirve mejor ("a mi me calzó")les dejo en una frase mi opinión...

Asi como el dolor de cabeza se cura con aspirina, el nacionalismo sigue la misma suerte VIAJANDO.

UN ABRAZO.

Fernando dijo...

Nacho:

Estoy de acuerdo contigo. Aunque yo distinguiría entre el nacionalismo en el sentido de creer que uno es mejor, o que todos los de la misma nación son iguales, de otra palabra que se suele llamar aquí también nacionalismo, y que significa federalismo, o que los asuntos locales se resuelvan localmente. El primer nacionalismo me parece otro fanatismo, otra ceguera absurda. El segundo me parece un ejemplo de democracia, y una forma más eficiente de gestión.

Saludos!

Anónimo dijo...

Fernando por fin coincidimos en algo. (en el blog)

Aunque veo que hablas mucho de identidad catalana, te dejo una frase de Octavio Paz.
La busqueda de la identidad es sólo el trabajo de sociólogos desocupados..

Fernando dijo...

Es una ironía divertida, aunque su libro "El laberinto de la soledad" es un ensayo sobre la identidad mexicana (excelente, por cierto). En este sentido me gusta también la idea psicoanalítica de que la identidad es una ilusión (o una trampa, en Lacan). Aunque probablemente no sea lo mismo la identidad individual que la de una sociedad, en cualquier caso ambas me parecen muy huidizas. Pero ya estoy diciendo tonterías otra vez, saludos!

Anónimo dijo...

No niego que las personas se junten por afinidad, cosas en comun, etc.... pero tb creo que casi siempre cuando se habla de identidad se está escondiendo un fondo razista, xenófobo y esto va (como diria vargas llosa) encontra de ese proceso histórico humano IMPARABLE de confusión de culturas, religiones, costumbres (lo que es en parte la globalización)
SLDOS!!!

Anónimo dijo...

Fernando, que bueno que hayas retomado tu blog, independientemente de toda la polémica de el nacionalismo, te cuento que el pueblo Argèles sur Mer, fue campo de concentración para los refugiados de la guerra civil española. Durante lus crudos meses de invierno, los españoles encerrados en la playa sin protección alguna, morían como moscas de disentería, tifus, tuberculosis y hambre. Mi abuelo pasó unas vacaciones de varios meses en esa playa francesa custodiados por guardias senegaleces. Si vuelves por allá y preguntas por este hecho, lo negarán aduciendo no acordarse

Anónimo dijo...

SALUDOS DESDE ARAGÓN ANTICATALANISTA.

Anónimo dijo...

No existe ni ha existido nunca la tan ansiada nacion catalana,siempre ha sido un condado dependiente de francia despues de aragon y despues de españa ,si alguien puede reclamar una nacion con justicia son los aragoneses asi como los navarros ,castellanos, leoneses y asturianos.vascos catalanes y gallegos no han sido nunca reinos ni naciones pero creen que deben serlo en virtud de que en sus regiones han quedado restos de lenguas antiguas habladas por pequeños grupos aislados y atrasados , son retrogrados y paletos ,pero nosotros no les vamos a hacer reflexionar, son bastante irracionales.

Fernando dijo...

Anónimo:

Aun cuando no estoy a favor del fanatismo nacionalista, puedo entender que ciertas regiones puedan buscar su independencia, si sienten que sus condiciones son desfavorables o que hay rasgos comunes muy fuertes (en mi opinión, Cataluña tiene más de lo primero que de lo segundo).

Aún cuando una región no fuera nunca una "nación", eso no impide que tenga derecho a querer serlo. España no comenzó como una nación, de hecho sólo lo ha sido durante unos pocos siglos. Argentina tampoco. Portugal fue parte de España durante un buen tiempo, y hoy nadie le discute su soberanía. Los catalanes no estaban en una situación muy diferente, pero tuvieron otra suerte.

En cualquier caso, lo de la antigüedad de una lengua me parece una estupidez. Aunque me agradaría recordar que el latín era la lengua oficial (y muy antigua) de la Iglesia hasta mediados del siglo XX, aún así, con un ejemplo tan claro, la relación no se sostiene. El alemán es una lengua por lo menos un milenio más antigua, y no me parece que Alemania sea un país especialmente retrógrado. O Finlandia. Otros tal vez sí. Pero lo retrógrado, me parece, depende de otros factores que la antigüedad de la lengua que hablemos. ¿O es que para ser moderno y racional debemos aprender esperanto?

Saludos