Google
 
Web En este blog

domingo, noviembre 28, 2010

Andorra la Vella

El año pasado pasé un fin de semana en los Pirineos catalanes, y aproveché para ir a conocer Andorra, uno de los países más pequeños de Europa.

La entrada al país estaba saturada de coches, así que estuvimos más de una hora circulando a paso de hombre. Andorra es un país donde los productos no tienen impuestos, y tiene fama de ser muy barato. Aunque la diferencia dicen que era más notable en los tiempos de la peseta, aún ahora, con el euro, hay algunas cosas más baratas (tabaco, alcohol, perfumes, óptica, pequeña electrónica). Hay también muchos comercios de artículos de lujo (joyas, Ferraris, etc.).

Buscamos un lugar donde dejar el coche (pago, por supuesto) y salimos a dar una vuelta por la ciudad de Escaldes, encerrada entre montañas.


El río bajaba fuerte, estábamos en época de deshielo, supongo.


Alguna que otra casa antigua. En Andorra se habla el catalán, aunque también recibe muchos visitantes franceses.


Parece ser que en verano Andorra está llena de portugueses que ganan más dinero aquí que en su país. En invierno, Andorra vive mucho más, por tener uno de los centros de spa y aguas termales de Cataluña, y por el esquí. Es la época en la que, dicen, llegan muchísimos monitores de esquí argentinos, que van siguiendo el invierno y hacen la temporada en la zona.



Más fotos del río. Era fotografiar eso, o comercios. Prefiero el agua.




Una plaza en la calle más comercial de Escaldes, una de las ciudades de Andorra.


Una escultura enorme junto al río:


Al final no saqué ninguna foto de la calle comercial. Hay que imaginarla como una serie de negocios de diferentes escalas, desde un lugar pequeño de artículos japoneses hasta centros comerciales muy grandes. Como no me considero consumista, no me interesó mucho, pero al que le guste comprar le recomiendo ponerse un límite antes de visitar la ciudad.

Después de gastar algunos euros en tabaco, MP3 y algún perfume, volvimos a Llívia. A la salida nos revisaron el maletero (baúl), aunque lo único que les interesaba era contar cuántos cartones de cigarrillos llevábamos, o hacer un poco de teatro para que Europa no los ponga en la lista negra de países dedicados al contrabando y a ser un paraíso fiscal.

1 comentario:

Pepa dijo...

Hola!
Quería saber si te interesaba que enlacemos nuestros blogs.
El mío se llama "argentina en Barcelona" y también cuenta mi experiencia emigratoria, solo que la mía fue corta y de tiempo limitado, pero creo que puede interesarte que al meterse la gente en alguno de los dos blogs llegue al otro también. :-)
Decime qué te parece!
www.argentinaenbarcelona.blogspot.com

Un beso!
Pepa