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jueves, octubre 18, 2007

Salou

El 31 de julio fui con mi madre y mi hermano a Salou. Es una ciudad costera ubicada al sudoeste de Tarragona, a 103 kms. al sudoeste de Barcelona, en la Costa Dorada. Fue fundada por los griegos en el siglo VI a. C., siendo un puerto comercial durante la Edad Media y la Edad Moderna. Hoy es primordialmente una ciudad turística, y tiene la gran ventaja de estar situada junto al parque de diversiones Port Aventura.

En el mapa, se ve a Salou a la izquierda, subrayado en rojo. Se puede ver con mayor detalle haciendo click en la imagen.

Así que subimos al tren de Cercanías en Sants, y después de una hora llegamos a la estación de trenes. Bajamos directamente hacia la playa:


Las playas de Salou son de una arena finísima (creo que aún conservo parte), y el agua de mar es aún más caliente que en Barcelona o Sitges. Por eso creo que nunca estuve tanto tiempo seguido dentro del mar, de hecho tuve que salir porque me dolían las puntas de los dedos de lo arrugados que estaban. Además, ¡había olas! No de las que se pueden barrenar (hacer surf sin tabla), pero sí de las entretenidas.

Después de pasar varias horas en la playa, nos fuimos a dar una vuelta por la costanera. Estábamos un poco lejos de los hoteles para guiris, y había muchas casas de lujo.






Encontramos una fuente extraña que lanzaba chorros de agua de tal manera que podías bañarte caminando por dentro:


La vegetación urbana estaba impecable, como se ve en esta foto:


Este es el comienzo de una de las calles que se adentraban en la ciudad:


Este es el monumento a ya-no-me-acuerdo-qué:


Un hotel:


Ya comenzaba a atardecer, así que rodeamos esta fuente y comenzamos a regresar, esta vez por una avenida interna:



Esta foto probablemente no le haga justicia a la ronda. La franja naranja es un cantero con muchas plantas, todas intactas y de la misma altura:


Junto a la estación de tren volvimos a encontrar esta construcción atípica. Según la Wikipedia, resulta ser La Torre Vella (Vieja) , construida en 1530 para defender la ciudad de los saqueos piratas.


Mientras esperábamos nuestro tren de cercanías, se nos advirtió por los altavoces que nos alejáramos lo más posible del borde del andén. Pasaba un tren de alta velocidad, que según el mito urbano puede llegar a absorberte hacia las vías si estás muy cerca. El AVE (Alta Velocidad Español) pasa por Salou y llega hasta Tarragona. Supuestamente llegará a Barcelona en diciembre, aunque están teniendo algunos problemas para instalar las vías (y después quieren hacerlo pasar por debajo de la Sagrada Familia, lo que me parece una mala idea).

En conclusión, después de esperar un rato, nos subimos al tren y regresamos a Barcelona, con la idea de ir a conocer la Costa Brava el día siguiente.

Sant Pol de Mar

Durante todo julio me dediqué a ir a playas nuevas para mí, pero sin cámara de fotos. El 30 de julio, aunque estaba nublado, le ofrecí a mi madre mostrarle la playa más bonita que había conocido hasta ese entonces (pronto vendrán las fotos de Tossa de Mar, que es aún mejor).

Se trataba de una cala entre Sant Pol de Mar y Calella, dos pueblos catalanes ubicados al norte de Barcelona, en el Maresme. Así que nos subimos a un tren de Cercanías, y nos bajamos en Sant Pol de Mar.

La estación de trenes del pueblo está muy bien, de hecho es la única que he visto que tiene terrazas de bares. El pago del pasaje parece ser más bien a libre voluntad, ya que se puede entrar a un bar desde el pueblo, atravesarlo y salir por atrás al andén.

El pueblo entero es muy agradable, aunque bastante empinado. Saliendo por el norte me di vuelta y saqué esta foto:


Hacia adelante, se extendía la autopista. Empezamos a caminar y, aunque había playas que prometían, seguimos adelante hasta mi cala preferida. Aquí ya se la ve:


Bajamos, luego de haber caminado un par de kilómetros, y saqué esta foto donde se ve Sant Pol al fondo.


Debajo de esta roca se puede hacer buceo submarino. El agua es aún más transparente que en las playas de más al sur, aunque un poco menos cálida.


Arriba de este promontorio está la autopista y el camino para descender a la cala:


Otra foto hacia atrás. Es que eso de la luz pasando entre las nubes me gusta mucho:


Estas son fotos hechas a medida de que caminaba hacia la parte norte de la cala. No me quería adentrar mucho con la cámara en la mano porque del otro lado están los nudistas, que suelen preferir la privacidad.




Aquí se ve el chiringuito de José. Tiene unas mesas ubicadas casi encima del mar, y hace una paella excelente (aunque algo cara: 40 euros para dos personas). Arriba se ve la autopista, y por debajo pasa el tren de cercanías a toda velocidad.


Después de un par de horas subimos a la autopista y caminamos hacia el norte, hacia Calella. Fui sacando algunas fotos de lo que se veía desde arriba:








Aquí se ve, muy pequeño, a un hombre nadando, a unos 200 metros de la cala más cercana.


Cuando estábamos llegando a Calella, hice esta foto de su playa. Calella significa algo así como "pequeña cala", y de hecho está construida alrededor de una:


Seguimos caminando por la costa, hasta llegar a la estación de trenes (que está casi al final). Cuando ya anochecía nos subimos a un Cercanías y regresamos a Barcelona.

miércoles, octubre 17, 2007

Girona

El 1 de julio fui, otra vez, a Girona, esta vez para mostrar la ciudad a mi madre y a mi primo.Ya he escrito otras veces sobre esta ciudad: 1 2 3. Así que seré más bien breve.

Esta es una calle en la que nunca había estado:



Aunque no quería entrar a la Catedral, que es paga, resultó ser que los domingos se podía entrar gratis. Para preservar el negocio, no se podían sacar fotos, pero aquí hay algunas hechas a escondidas. Había altares enormes hechos completamente de oro, pero por la poca luz esas fotos no salieron.







Parado encima de un acantilado, saqué esta foto de unos restos de lo que creo que era la antigua muralla romana:


Defender la ciudad podía llevar mucho tiempo, y era muy cansador volver a casa cuando uno tenía una urgencia en pleno combate. Desde lo alto de la muralla, entonces, uno podía literalmente cagarse en los enemigos (cuidado con las flechas):



Esta torre tiene un estilo muy diferente a todo el resto:


No es la Torre de Pisa, es sólo un mal fotógrafo:


La Catedral, desde lo alto de la muralla:


Creo que esto es el Convento de San Daniel, que sigue en obras:


Aquí me encontraba a punto de tocarle el culo mágico al mono-rata, perro-león, o lo que sea eso.


Un primer plano de un animal cansado de que le besen y le toquen el culo:


Como es común aquí, los detalles de la vegetación están muy bien cuidados:


Un bebé menos en el mundo:


Las casas colgadas del río Oñar (nunca me voy a cansar de hacerles fotos):


Alguna iglesia, no recuerdo cuál: